Por Humberto Hernández Haddad
1.- El debate fiscal que se libra intensamente esta semana en el Congreso de la Unión, siempre es útil porque permite impulsar la construcción de un sistema fiscal transparente con vigilancia democrática, además que permite la discusión pública sobre las contribuciones que habrán de pagar los ciudadanos y las empresas, conociendo el origen y el destino final de los dineros públicos que ejercen los tres niveles de gobierno, Federación, Estados y Municipios a través de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
2.- En medio de ese análisis que está realizando el Congreso para determinar los impuestos del año fiscal 2010, surgió una importante llamada de atención suscrita por Armando Paredes, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, criticando la propuesta del Paquete de Ingresos 2010, ya que se pretende aumentar impuestos mientras que el gobierno federal y los gobernadores aumentan su gasto corriente de manera escandalosa.
3.- La realidad política nacional le da la razón al Consejo Coordinador Empresarial cuando expresan su inconformidad ante el Congreso diciendo: “Están incrementando impuestos para seguir manteniendo un nivel de gasto que ya ha sido escandaloso. En los últimos diez años, ha crecido casi en 80% el gasto corriente del gobierno federal.”
4.- Por lo que se refiere a los gobiernos estatales, la posición crítica del Consejo Coordinador Empresarial se expresó así: “En el caso de los estados, vemos que en los últimos tres años han ejercido sobrepresupuesto; hay un sobreejercicio presupuestal por arriba del asignado a los estados, por alrededor de 350 mil millones de pesos, que equivale precisamente al boquete fiscal que tenemos en este momento.”
5.- Es importante revisar transparentar y legitimar ante los ciudadanos toda la estructura del gasto corriente del gobierno de México en sus tres niveles de gobierno, antes de que estalle una crisis de ingresos fiscales, o peor aún, se inicie un movimiento ciudadano de inconformidad fiscal, el cual tendría mayores motivaciones político-electorales que la sana intención de resolver verdaderamente el problema del ejercicio del gasto público.
6.- Muy caro está pagando nuestro país la falta de un régimen jurídico eficiente de transparencia y rendición de cuentas en la actuación de los servidores públicos que tienen a su cargo oficinas de gobierno, sean federales, estatales o municipales. Ello es así porque en un país que acaba de recibir ingresos sostenidos durante 10 años de bonanza petrolera, hoy tenemos la emergencia de un boquete fiscal anticipado de más de 300 mil millones de pesos para el año 2010, además de los casi 400 mil millones de pesos del boquete de este año 2009.
7.- Ante esta realidad, resulta urgente que el Congreso de la Unión subsane la falta de los criterios jurídico normativos para que México se gobierne con un régimen de transparencia y rendición de cuentas públicas. Mientras más tiempo pase, más grave será la crisis fiscal del Estado Mexicano, que pudiera llegar a desembocar en tensiones entre la Federación y los gobiernos de los estados.
8.- Varias corredurías financieras internacionales que han bursatilizado deuda de algunos gobiernos estatales, han comenzado a dar la voz de alerta desde el mes de septiembre sobre un par de esos gobiernos estatales, a los que señalan de estar incurriendo en endeudamientos excesivos que pueden volver insostenibles sus tesorerías estatales de gobierno. Lo sorprendente es que la prensa de esos estados ha guardado silencio y las autoridades federales no han manifestado ninguna opinión.
9.- El año 2010 plantea un doble reto a México. Por un lado estirar los recursos públicos para satisfacer sus necesidades presentes y rezagadas, por lo cual podemos prever que los rezagos aumentarán. Pero por el otro lado esta crisis presenta la oportunidad de realizar una auto revisión de las actividades nacionales, lo que de manera inevitable tendría que incluir las formas de ejercicio del poder en México, y específicamente la manera en que se gasta el dinero del Erario Público.
10.- Mientras se mantenga vigente la opacidad del actual sistema de ejercicio del gasto público será imposible para México salir del subdesarrollo. Esa es la experiencia que nos dejó la bonanza de las exportaciones petroleras de los últimos diez años. Tarde o temprano, será el Congreso de la Unión el que tenga que fijar las nuevas reglas para el ejercicio transparente, responsable y eficiente del gasto público. No hacerlo es un mal negocio que condena a México a vivir en el subdesarrollo.
2.- En medio de ese análisis que está realizando el Congreso para determinar los impuestos del año fiscal 2010, surgió una importante llamada de atención suscrita por Armando Paredes, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, criticando la propuesta del Paquete de Ingresos 2010, ya que se pretende aumentar impuestos mientras que el gobierno federal y los gobernadores aumentan su gasto corriente de manera escandalosa.
3.- La realidad política nacional le da la razón al Consejo Coordinador Empresarial cuando expresan su inconformidad ante el Congreso diciendo: “Están incrementando impuestos para seguir manteniendo un nivel de gasto que ya ha sido escandaloso. En los últimos diez años, ha crecido casi en 80% el gasto corriente del gobierno federal.”
4.- Por lo que se refiere a los gobiernos estatales, la posición crítica del Consejo Coordinador Empresarial se expresó así: “En el caso de los estados, vemos que en los últimos tres años han ejercido sobrepresupuesto; hay un sobreejercicio presupuestal por arriba del asignado a los estados, por alrededor de 350 mil millones de pesos, que equivale precisamente al boquete fiscal que tenemos en este momento.”
5.- Es importante revisar transparentar y legitimar ante los ciudadanos toda la estructura del gasto corriente del gobierno de México en sus tres niveles de gobierno, antes de que estalle una crisis de ingresos fiscales, o peor aún, se inicie un movimiento ciudadano de inconformidad fiscal, el cual tendría mayores motivaciones político-electorales que la sana intención de resolver verdaderamente el problema del ejercicio del gasto público.
6.- Muy caro está pagando nuestro país la falta de un régimen jurídico eficiente de transparencia y rendición de cuentas en la actuación de los servidores públicos que tienen a su cargo oficinas de gobierno, sean federales, estatales o municipales. Ello es así porque en un país que acaba de recibir ingresos sostenidos durante 10 años de bonanza petrolera, hoy tenemos la emergencia de un boquete fiscal anticipado de más de 300 mil millones de pesos para el año 2010, además de los casi 400 mil millones de pesos del boquete de este año 2009.
7.- Ante esta realidad, resulta urgente que el Congreso de la Unión subsane la falta de los criterios jurídico normativos para que México se gobierne con un régimen de transparencia y rendición de cuentas públicas. Mientras más tiempo pase, más grave será la crisis fiscal del Estado Mexicano, que pudiera llegar a desembocar en tensiones entre la Federación y los gobiernos de los estados.
8.- Varias corredurías financieras internacionales que han bursatilizado deuda de algunos gobiernos estatales, han comenzado a dar la voz de alerta desde el mes de septiembre sobre un par de esos gobiernos estatales, a los que señalan de estar incurriendo en endeudamientos excesivos que pueden volver insostenibles sus tesorerías estatales de gobierno. Lo sorprendente es que la prensa de esos estados ha guardado silencio y las autoridades federales no han manifestado ninguna opinión.
9.- El año 2010 plantea un doble reto a México. Por un lado estirar los recursos públicos para satisfacer sus necesidades presentes y rezagadas, por lo cual podemos prever que los rezagos aumentarán. Pero por el otro lado esta crisis presenta la oportunidad de realizar una auto revisión de las actividades nacionales, lo que de manera inevitable tendría que incluir las formas de ejercicio del poder en México, y específicamente la manera en que se gasta el dinero del Erario Público.
10.- Mientras se mantenga vigente la opacidad del actual sistema de ejercicio del gasto público será imposible para México salir del subdesarrollo. Esa es la experiencia que nos dejó la bonanza de las exportaciones petroleras de los últimos diez años. Tarde o temprano, será el Congreso de la Unión el que tenga que fijar las nuevas reglas para el ejercicio transparente, responsable y eficiente del gasto público. No hacerlo es un mal negocio que condena a México a vivir en el subdesarrollo.
Totalmente de acuerdo con las ideas expuestas, México tiene un rezago de décadas en relación con otros países en sistemas que nos ayuden a transparentar el gasto público y creo que por ahí debemos de empezar.
ResponderEliminarYa que no estoy de acuerdo que a los mismos contribuyentes de siempre se nos quiera hacer pagar más impuestos sin saber que se hace con ellos. Además que los mismos sectores de siempre siguen siendo priviligiados sin contribuir al gasto público de la manera en que les corresponde. Estoy de acuerdo en pagar mas impuestos pero que sea en general, por ejemplo impuestos al consumo (IVA) pero no, (ISR).
Además todos debemos de pagar, es necesario ampliar la base de contribuyentes.