lunes, 12 de enero de 2009

Realidad china y oportunidades para las pymes en 2009

  • La estrategia asiática de la alianza puede emplearse por las pymes mexicanas
  • La cultura de networking será crucial en las economías de escala
  • México puede tener una relación estratégica con China
  • Por Mario Barron Pérez-Moreno
El Financiero en línea

El 19 de octubre de 2008 se publicó una nota en los principales sitios noticiosos en internet, que dejó perplejos a varios de los especialistas económicos y financieros que más apostaban por la “inmunidad económica de China frente a la inminente crisis financiera mundial”: en el titular se anunciaba que “el cierre de una enorme fábrica de juguetes en ese país debido a la crisis y que proveía a Mattel Inc. Hasbro Inc., así como a otras empresas estadounidenses, podría ser la señal de lo que ocurrirá en China y en Hong Kong, es decir, miles de personas que perderían su empleo”.

Para algunos economistas, el cierre de la fábrica Smart Union Group Holdings Ltd., ubicada en la ciudad de Dongguan, al sur de ese país, representa no sólo la grave situación en que se encuentra el sector industrial juguetero chino, sino que además, los consumidores en todo el planeta se verían también afectados por los incrementos en los precios y porque se advierten además, más cierres de empresas; de acuerdo con la agencia oficial china de noticias Xinhua, más de 3 mil exportadores de juguetes, que representan un 52,7% de la industria del país, cerraron sus fábricas durante ese año.

Esta difícil situación ha sometido además de esta industria en China, a otros sectores como el automotriz y como si se tratase de un signo contundente de la crisis global, se podía leer días después en los periódicos, que 9 millones de personas estaban en peligro de perder su empleo en China.



Ahora en el recién iniciado 2009, los temores proféticos parecen empezar a materializarse; la desaceleración económica en Estados Unidos ha debilitado a varios sectores de su industria a grado tal, que están reduciendo fuertemente las vastas operaciones manufactureras de China en provincias de Guangdong, Zhenshen y Fujian, consideradas en conjunto como la base de la fábrica del mundo.

MEDIDAS FUERTES EN SITUACIONES FUERTES

Cada vez son menos expertos los que opinan que a China no le está afectando la crisis iniciada en Estados Unidos, considerando su demanda de petróleo que se proyecta para este año con un aumento del 5.6% respecto a 2008, ya que al parecer la oferta no aumentará en el mismo ritmo, no obstante, se está impulsando una mayor demanda por parte de sus consumidores con suficiente poder adquisitivo en comprar boletos de avión y automóviles nacionales, como parte de un plan anticrisis lanzado en ese país; por otra parte, esta crisis ha afectado el sector automotriz en China, por lo cual su gobierno ha optado por favorecer las marcas nacionales.

He aquí el punto medular para hacer frente a esta crisis que en bocas de los principales líderes, no tiene precedentes, en otras palabras, es la decisión de impulsar planes de defensa económica, donde incluso México está dando el ejemplo con el Acuerdo Nacional en Favor de la Economía Familiar y el Empleo, que a pesar de las proyecciones de la OCDE de crecimiento con un 0.4% previsto para este año, la solución es la reacción rápida y efectiva de los planes y programas encaminados a proteger el empleo y el desarrollo de nuestras empresas, especialmente las más pequeñas, las cuales se verán favorecidas con el fomento a favorecer la compra de sus productos.
China y México han adoptado medidas fuertes ante una situación fuerte y bien podríamos enarbolar en un nivel nacional, lo acertado de las medidas económicas como puntos del Plan, como el fomento del gasto corriente, el cuidado fiscal o el impulso a la infraestructura para generar empleos de facto, que de por sí son elementales, pero un dato que nos compete y en donde convergen de muchas maneras estos elementos lo constituye la protección a las pymes mexicanas, de la misma manera que China o cualquier país asiático toman igual en cuenta.

En todo caso, la crisis será cíclica, pero presente y durante un período considerable dejará sentir sus efectos, sin embargo en la medida que las empresas, grandes, medianas, pequeñas y micros, se enfrenten de manera estratégica, más posibilidades tendrán de permanecer en el mercado e incluso con la estrategia adecuada, ser líder en su ramo.

LA ESTRATEGIA DEL JUEGO GLOBAL A CORTO PLAZO CONSISTIRÁ EN LA
REGIONALIZACIÓN

Ahora podemos apreciar en su justa dimensión con este ejemplo cómo Estados Unidos y China son interdependientes en muchos niveles, es decir a nivel industrial y financiero, lo cual puede servir de ejemplo si se comprende bien, a las empresas grandes y pequeñas.

La estrategia global de Asia en el futuro será la regionalización por medio de tratados estratégicos, en los que se están ya involucrando China, India y Singapur con países como Japón; por ello, Estados Unidos y Europa no tendrán otra opción que hacerlo también para mejorar y hacer efectivas las medidas para recuperar el rumbo económico, porque es un hecho, las medidas proteccionistas han perdido su efectividad, y esto es crucial justo en un momento en que el comercio exterior se está viendo afectado.

Hablamos de alianzas estratégicas, tanto a nivel país como a nivel región, que conformarán bloques comerciales y esta estrategia también deberá ser comprendida y adoptada por las empresas, particularmente las pymes; en este punto, México muy bien puede aprovechar las oportunidades que se están generando a pesar de la situación actual, de la buena relación que ha logrado con China, misma que debe ser apoyada y fortalecida.

Difícilmente México puede competir en sectores sensibles de la industria, pero sus empresas aunque sean pequeñas, muy bien pueden realizar grandes operaciones comerciales y de igual forma, a nivel país y a nivel empresarial se pueden concretar intercambios tecnológicos, en otras palabras, hallar nichos atractivos aplicando la cultura de la alianza o llamada “networking”.

LAS PYMES DEBERÁN ADOPTAR LA CULTURA DE LA ALIANZA

Pongamos un ejemplo: las redes competitivas de China se han encargado de los mercados mundiales mediante la reunión de empresas pequeñas y especializadas que trabajan en estrecha cercanía, el ejemplo más celebre es el de las numerosas empresas familiares de la provincia de Zhejiang en la década de 1990, que gracias a una buena organización y división de actividades entre las pequeñas y más grandes empresas, lograron la fabricación y comercialización exitosa de encendedores baratos y exportables a un sinnúmero de países, incluido el nuestro.

Es innegable: debemos especializarnos y dentro este reto el gobierno jugará un papel fundamental en el apoyo a las pymes, fomentando de manera más clara, la facilidad a créditos, la capacitación y una mayor vinculación empresarial con la academia; debe entenderse que la especialización, que nos llevará por el camino de la competitividad (ser más atractivos, poder producir mejor y a menor precio) será más fácil con la unión de intereses.

Para poder tener un mejor acceso a estas estrategias, será indispensable que las pymes mexicanas aprendan a aprovechar las oportunidades mediante la unidad, la alianza entre empresas, vamos, la creación de una cadena o ya insertos en la evolución global, las redes de valor.

* Analista Económico y Financiero

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